Muchas gracias VR YA por el hermoso ejemplar!
Tras brillar y ser, llegó la hora de que te animes a vivir.
Glenn es una soñadora que vive enamorada del amor. Pero, sujeta a las estrictas normas de su familia, debe ocultar todo aquello que le gusta y todo con lo que sueña.
Cuando deja su casa para ir a un seminario, cree por fin conocer la libertad. Allí se encuentra con Ben, el partido perfecto. Sin embargo, también aparece Dave, alguien a quien su padre echaría a patadas...
Glenn piensa que Dave es todo lo que jamás le atraería. Pero inesperadamente él la incita a ir en busca de sus sueños, y volver a verlo se convierte cada vez más en una necesidad.
¿Siempre es malo romper las reglas?
¿Cuál es el precio de la libertad?
Llegó el final tan esperado de esta trilogía y yo estoy triste y contenta al respecto. Triste porque voy a extrañar a los personajes que me acompañaron por varios meses y contenta porque pude disfrutar de ellos una vez más.
Debo decir que me intrigaba mucho leer la historia de Glenn, porque de las tres amigas (Gleen, Val y Liz) ella es de la que menos sabemos en los libros anteriores debido a que sus padres no la dejaban participar de muchos eventos sociales, entonces en este libro sabemos el porqué de sus escasas apariciones y también conocemos un nuevo lado de ella.
Glenn Jackson proviene de una familia católica muuuy estricta y, me atrevo a decir, ortodoxa. Sus padres no le permiten ver k-dramas, ni escuchar música que no sea religiosa, ni leer otra cosa que no sea la Biblia. Cuando falleció la hermana de Val, no le permitieron asistir al velorio, y ahora que se enteraron que Liz está embarazada, tampoco quieren que se junte con ella porque es "mala influencia". Glenn, que en una época de su vida obedecía al pie de la letra todo lo que sus padres le decían, empieza a cuestionar estas reglas, empiezan a hacerle ruido, pero no puede comentarle nada a su familia, porque tiene miedo de que la obliguen a quedarse en casa en lugar de ir al seminario que logrará darle la dosis justa de libertad que necesita.
A pesar de que en el seminario hay muchos jóvenes de la edad de Glenn y con gustos muy similares a los de ella, Glenn se siente fuera de lugar. ¿Por qué los profesores insisten tanto en lavarles el cerebro a los estudiantes? Esta experiencia es la que empieza a moldear las creencias propias de Glenn, y también la que la impulsa a vivir por ella misma y no por las estructuras de otros.
Me gustó mucho como Anna abordó la historia de Glenn. Verdaderamente, la Glenn que conocemos al principio del libro es una muy distinta a la que conocemos al final, aunque sin perder su esencia. Algo que rescato de la vieja Glenn es que si bien ella se separa de su familia, no pierde sus valores religiosos. Uno creería que parte de su emancipación implicaría en renunciar al catolicismo, pero no, ella pudo ver la otra cara de la moneda, lo cual admiro un montón. Yo, al igual que Glenn, me crié en un entorno católico. Tanto en el colegio como con mis familiares, me vivía peleando por sus ideologías (como que la homosexualidad es una enfermedad, que la transexualidad es sinónimo de posesión demoníaca o que la mujer es la culpable de todos los males del mundo). Encontrarme con tanta gente (también en las redes sociales) perteneciente al catolicismo acosando y hostigando a otros por pensar y sentirse distinto marcó una huella importante en mi vida. Yo, por el contrario de Glenn, decidí alejarme de la religión católica, pero encontré refugio tanto personal como espiritual en la brujería y el paganismo. Respeto profundamente a quienes tengan creencias distintas de las mías y siempre estoy dispuesta a aprender y a intercambiar opiniones, así que con esto no quiero decir que niego las creencias de la protagonista, de la autora o de otra persona. En fin, volviendo al libro, admiro que Glenn haya podido mantenerse fiel a su manera.
Vivirás no es solo una historia de amor, como sabemos por la sinopsis (y por haber leído otros dos libros de una temática similar anteriormente), sino que también es una historia de autodescubrimiento. Al ser libre de las cadenas de sus padres y de su iglesia, Glenn (con el apoyo de Dave) se permite soñar y animarse a hacer todas esas cosas que antes no le fueron permitidas para formar su propia persona.
Tres cosas que aprendemos con este libro son: 1) atreverse a soñar a lo grande, 2) el amor verdadero acompaña y no destruye, y 3) no negarle la felicidad a los demás.
Frase que más me gustó:
"Si él era leal a mí, yo era leal a él. Ahora yo era su pandilla".
¡Hola! Parece que enseña cosas muy chulas y seguramente sea un libro que valga la pena pero yo no sé si me animaré con él. Un besote :)
ResponderEliminarHola Andy!!
ResponderEliminarGracias por la recomendación, se lee interesante.
Besos💋💋💋